Para alentar el impacto Brexit, se requerirá cierta relajación de la política monetaria en el verano.

 Mark Carney, gobernador del Banco de Inglaterra, acepta que la entidad en este mismo verano puede verse obligada a colocar en funcionamiento las medidas de impulso para paliar el impacto del Brexit en la economía.
Carney señaló que desde su punto de vista los matices económicos se han debilitado, siendo posible que para el verano que se necesite cierto desahogo de la política de capitales
Antes de que se produjera el referéndum el gobernador, ya había avisado acerca de que se acercaba en Reino Unido una factible recesión, en caso de que ganara el Brexit, expresó asimismo que el Comité de Política Monetaria del banco hará una primera evaluación de la escenario tras el Brexit, el próximo 14 de julio.
Que para el día 4 de agosto, el banco tiene planificado renovar para Reino Unido sus previsiones económicas, precisando que también discutirán en el mes de agosto a fondo sobre la gama de instrumentos a que tienen a sus disposiciones
Los inversionistas están en la espera de que el banco baje a cero las clase de intereses que corresponden a este verano, en estos momentos tiene un histórico de 0,5%.
La declaración del gobernador del banco de Inglaterra antes de que se llevara a cabo el referéndum, señaló que se sentía competente para inyectar 250.000 millones de libras equivalente a 312.187 millones de euros, en aras de garantizar el funcionamiento de las entidades financieras y de los mercados, después del terremoto bursátil.
Reuters informa que los capitales de inversión ven que se eleve esta cantidad a 375.000 millones de libras. El portavoz del FMI, Gerry Rice, por su parte, sugirió que: el Brexit ha establecido una incertidumbre bastante significativa con respecto a la economía global, que por su parte cree que va a congelar el desarrollo mundial, solicitando las acciones decisivas para aminorar el efecto del Brexit.
Rice exigió tanto a las autoridades europeas como a las británicas que se desenvuelva lo más apresuradamente posible el acuerdo de divorcio, sin embargo priorizó en la solidez del asunto de cara al calendario. Razón por la que señaló, apresurarse hacia un mal resultado lesionaría los intereses de todos.
En las próximas proyecciones que emitirá FMI, las que se harán oficiales el día 19 de julio, ya vendrán incorporadas las que tienen que ver con el efecto del referéndum británico. Así pues el adiós inminente a la Unión Europea del Reino Unido no habría derivaciones únicamente para la economía británica, sino también para todo el planeta.
La agencia de calificación Standard and Poor’s: S&P, este jueves hizo una diminución o reducción de un peldaño de la nota del crédito a largo plazo que corresponde a la Unión Europea (UE), hasta llegar a doble AA con representación sólida, ante el gran escepticismo que se resulta del mismo Brexit, como consecuencia de la separación o el divorcio que solicitará próximamente formalmente Reino Unido ante la Unión Europea.