Durante la pasada semana, la Unión Europea (UE) ha decidido prolongar los controles de radioactividad a los alimentos japoneses por la catástrofe nuclear de la central de Fukushima, al menos serán prolongados hasta final de año.
Por lo tanto, los productos procedentes de 12 prefecturas del país nipón serán analizados sometiendo se a pruebas de radiactividad antes de salir de Japón, siendo objeto de controles reforzados en la Unión Europea.
Además, estos productos deberán estar acompañados de una declaración que especifique su origen. De todos modos, el riesgo derivado del accidente nuclear de Fukushima es considerablemente bajo según ha indicado el Ejecutivo comunitario. En cualquier caso, la Comisión continuará analizando los productos para asegurar que los productos alimenticios que entran en la UE de Japón son seguros.