El Gobierno Colombiano expidió el día de ayer el decreto 4809 de diciembre 20 de 2011 en donde se le puso tope a algunos de los cobros bancarios; si algún Colombiano pagaba entre $4.800 y $7.500 por retirar en un cajero automático diferente al de su banco, a partir de la fecha por este servicio no le podrán cobrar más de $3.965. Además, si una persona declina una transacción en un cajero, desde hoy no le podrán cobrar por dicha transacción no exitosa; hasta ayer, los bancos por transacciones declinadas cobraban hasta $6.000, como si hubiera hecho efectivo el dinero.
El ministro de hacienda Juan Carlos Echeverry, dijo que el decreto rige desde hoy y es permanente, también explicó que la medida se puso en marcha con el fin de incentivar la bancarización en el país, también el objetivo es proteger a los usuarios del sistema financiero e impulsar la libre competencia entre las redes bancarias.