Dos días después de que el presidente del Gobierno de España, Jose Luis Rodriguez Zapatero, anunciara un “plan de retirada” de las tropas españolas con final en 2013, una potente bomba ha provocado un terrible desastre que ha acabado con las vidas de dos militares españoles en Afganistán.
Estamos hablando del segundo atentado que ha tenido lugar en tan solo ocho días que sufren militares españoles y, a falta de análisis, se cree que pudo ser ejecutado con el artefacto más potente utilizado hasta la fecha. El suceso tuvo lugar exactamente en la ruta Lithium.
A las 8:30 de la mañana, un convoy español compuesto por siete blindados salió del destacamento avanzado de Ludina destino a la base de Qala-i-Naw. El convoy hacía tareas de reconocimiento durante la ruta, y casi dos horas mas tarde, a las 9:45 (hora peninsular), un artefacto hizo explosión afectando de lleno al lado derecho del primero de los blindados. Dos militares fallecieron en el acto mientras tres resultaron heridos y fueron trasladados en helicópteros medicalizados al hospital de la base española de Herat.