Si este año las plazas de España se han revolucionado junto a millones de protestantes, ahora es Chile quien toma la calle. Durante el día de ayer, una multitud de jóvenes (miles) salieron a las calles chilenas para exigir una reforma electoral y un cambio de constitución que incluya educación gratuita.
Las calles de Santiago, La Serana y Concepción, de norte a sur, se llenaron de estudiantes protestantes repletos de pancartas cual movimiento 15-M demandando gratuidad en la educación más cara de América Latina.
Los agentes policiales del país contabilizaron más de 50.000 personas en la capital, y es que siete de cada diez jóvenes chilenos se muestran a favor de esta reforma en la educación del país según un sondeo que llevó a cabo la Universidad Técnica Federico Santa María. Estas manifestaciones contradicen abiertamente el programa del presidente derechista Sebastián Piñera.